Hola de nuevos a todos!
Seguro que muchos de vosotros estaréis ya de vacaciones y otros a punto de empezarlas.
Desde aquí os deseo que disfrutéis de ellas. Es importante tomarnos períodos de descanso para así poder volver al trabajo con energías renovadas .
El verano, el sol, la playa… nosotros en la farmacia asociamos esta estación con la dispensación de Solares.
Con la llegada del verano se convierte en un artículo de primera necesidad y quien prescinde de él, llega a nuestra farmacia con la piel bien roja, ya considerada una quemadura de primer grado, a buscar algo para calmar los síntomas. Es ya una piel agredida.
En la farmacia de hace unos años, en muchas ocasiones, tratábamos a estos clientes con corticoide para aliviar los síntomas, sin embargo, no se tenía en cuenta que es un medicamento fotosensible.
Recordar la cantidad de fármacos que producen fotosensibilidad.
Si los has olvidado puedes buscarlo en este mismo blog de Coach Farmacia.
En el post de hoy quiero recordar qué ocurre exactamente en nuestro cuerpo cuando se produce Fotosensibilidad. Es importante hacerlo para poder explicarlo y dar consejo a nuestros clientes.
Una fotosensibilidad es una reacción a la radiación solar. En nuestro cuerpo se producen diferentes tipos de reacción.
La primera es la fotorreacción que es lo que normalmente vemos en el mostrador. Genera efectos agudos tales como enrojecimiento de la piel exagerado, descamación intensa de la piel, reacciones oculares y eczemas. Entre los efectos crónicos, se cuentan el envejecimiento cutáneo prematuro y el debilitamiento del sistema inmunológico de la piel.
También puede producir fotoreaccion con desodorantes, jabones antisépticos, y sales de cadmio, muy utilizadas en los tatuajes.
La fotorreacción es muy evidente, la vemos en la inflamación de la piel, picor, rojez, estado de inconfort.
Y nosotros tenemos un gran papel, tanto en la prevención como en el tratamiento de sus síntomas. Recordad la cantidad de productos que tenemos para después del sol, desde un agua Thermal pasando por cremas con propiedades reparadoras y calmantes.
La segunda reacción es la Fotoalergia. La reacción fotoalérgica se produce cuando los rayos UV modifican la estructura química de algún componente de una medicación o producto cosmético aplicados sobre la piel.
Los síntomas de la reacción pueden aparecer inmediatamente después de iniciada la exposición directa a la luz UV o diferidas por lapsos variables de tiempo. En algunos casos, las reacciones también pueden ocurrir hasta tres meses después de la exposición.
Algunos cosméticos contienen productos que se reconocen como potencialmente fotoalérgicos, tales como el almizcle, el aceite de sándalo y bergamota, algunas quinolonas y AINES
Los síntomas pueden ser los mismos que en la fotorreacción.
La Fototoxicidad es una tercera reacción. A diferencia de la anterior, produce afectación del sistema inmunitario. La producción de radicales libres aumenta nuestro riesgo de envejecimiento prematuro.
Los niveles de toxicidad en sangre son muy altos con riesgo de adquirir o contraer otras enfermedades relacionadas con el sistema inmunológico
La reacción puede ocurrir inmediatamente o de forma posterior con respecto a la exposición y aparece sólo en las regiones expuestas.
Estas reacciones y el daño causado pueden persistir por largo tiempo. Existen informes que hablan de persistencia del problema durante más de 20 años.
Dicen que la piel tiene memoria y es así. Los efectos adversos del sol, en la mayoría de casos, no son evidentes, pero el ADN de nuestras células sí que se ve afectado por la radiación UVA y ese es un daño irreparable.
Vivimos en un país en el que el sol está muy presente. Forma parte de nuestra cultura ,de nuestra forma de vivir. Pasamos muchas horas expuestos al sol. Por tanto, todos los días tenemos un alto riesgo de que nos ocurra alguna de estas reacciones .
Las manchas, el cloasma o el melasma es un mal menor ya que es estético o simplemente nos avisa que hay reacción en nuestro cuerpo.
Hablando con dermatólogos en una formación de solares me explicaban que el carcinoma, melanoma, estaban cada día más presentes en sus consultas y cada vez más en gente joven. Y sin embargo, el cáncer de piel se podría evitar. Debemos tomar conciencia de ello.
Una buena protección solar, evitar la exposición a horas puntas, renovar el solar cuando salimos del agua o cuando llevamos más de 2 horas de exposición.
Son algunos de los consejos que no debemos dejar de dar en cada dispensación de fármacos.
Recordad dar consejos a vuestros clientes, informar de los peligros del sol en verano conjuntamente con la medicación, y cuando detectes alguna fotosensibilidad, informar de que esta ocurriendo en su cuerpo y cómo puede prevenir.
Que paséis una buena semana!
Y recordad, ayudar no es parte del deber si no de la felicidad.
Carmen Fernández – Coach Farmacia.